Monday, March 23, 2009
Una campaña ¿exitosa?
El fin de semana pasado asistí al curso “Una campaña exitosa”, impartido por Galo W. Limón en las instalaciones del controversial Centro Fox, en la comunidad de San Cristóbal.
Galo ha sido asesor en numerosas campañas políticas del PRI, PAN y PRD, así como de la Secretaría de Gobernación Federal, Gobierno del Estado de Guanajuato, Universidad de Guanajuato y Canal 4. Es también autor de los libros Marketing Hídrico, Política con Sentido Común y Una Campaña Exitosa.
El curso está dirigido principalmente a políticos en campaña, pero aunque éramos alrededor de 100 asistentes tal vez, cuando se les pidió que levantaran la mano a los candidatos, en realidad no eran más de 4 o 5. Alguien del público dijo (medio bromeando pero con mucha verdad de fondo) que los políticos no iban a ese tipo de conferencias porque ya lo saben todo. Y este fue precisamente uno de los ejes centrales durante toda la plática; hacer las cosas de manera diferente, darle la vuelta a la moneda… los tiempos han cambiado y aquel que se quede estacionado en las viejas convicciones e ideas, por mucha lana que le meta a su campaña, no tiene demasiadas probabilidades de ganar. Lo que antes funcionaba ahora es obsoleto, las reglas del juego son otras, el electorado se ha vuelto más inteligente, los espacios en medios de comunicación masiva como tele o radio se restringieron mientras Internet cobra una fuerza inaudita, tal y como ejemplificó Fernando Bribiesca (la “oveja blanca” de la familia Bribiesca Sahagún, como se le conoce en los medios por haberse mantenido alejado del escándalo de sus hermanos; al parecer a él sí le gusta chambear) en el apartado de “Medios Alternativos” con la campaña de Obama a través de Youtube.
Resulta en verdad increíble que los candidatos prefieran gastar a lo loco miles o incluso millones de pesos en su campaña política, cuando simplemente con una buena estrategia, un eslogan pegajoso, una encuesta que sirva, una foto carismática… cambiando el enfoque de su discurso trillado, utilizando medios alternativos de publicidad, tratando de escuchar más de lo que hablan, creando empatía con la población en vez de distanciamiento… por supuesto que se obtendrían mucho mejores frutos y con una pequeña fracción del montón de dinero que invierten la mayoría para terminar perdiendo.
Si nuestros políticos no tienen la humildad y el interés de asistir a un curso impartido por profesionales en la materia, ¿ustedes creen que se van a molestar en escuchar los problemas de las comunidades rurales, por ejemplo? Su soberbia y cerrazón no tienen límites. Lo preocupante del asunto, creo yo, es que si por obra y gracia del espíritu santo (o del señor don dinero a carretadas) estos ilustres personajes llegan a obtener el anhelado hueso, seguirán la misma línea de su campaña, teniendo como asesores y colaboradores cercanos al compadre, primo o vecino, en lugar de gente capacitada que sepa realmente de lo que se trata la polaca… despilfarrando sin ton ni son los recursos públicos y todavía teniendo el descaro de venir a presumírnoslo con espectaculares y spots: ¡¡¡chorrocientos mil millones en obras!!! Como si mientras más dinero se tire a la basura fuera mejor y cantidad fuera igual a calidad.
Al final, tanto en política como en la vida misma, efectivamente todo se reduce al sentido común, aunque bien sabemos que suele ser el menos común de los sentidos. Los errores de principiante que vemos en la temprana acometida publicitaria de esta campaña electoral no tienen perdón de Dios… partidos que continúan tratando de defender lo indefendible, promocionándose a sí mismos con spots patéticos, como si no supieran que precisamente los partidos políticos son las instituciones con menor credibilidad en el país… candidatos (o candidatas) angustiados porque salieron prietos y poco agraciados en la foto (contra mater natura nada se puede hacer), sin darse cuenta siquiera que con esa cara de tamal aplastado (¿en verdad les resulta tan difícil sonreír?) no van a convencer ni a un asno de que vote por ellos. Ojalá les aproveche el dinero que se están “ahorrando” con tal de no contratar a buenos publicistas.
aronti@yahoo.com
Galo ha sido asesor en numerosas campañas políticas del PRI, PAN y PRD, así como de la Secretaría de Gobernación Federal, Gobierno del Estado de Guanajuato, Universidad de Guanajuato y Canal 4. Es también autor de los libros Marketing Hídrico, Política con Sentido Común y Una Campaña Exitosa.
El curso está dirigido principalmente a políticos en campaña, pero aunque éramos alrededor de 100 asistentes tal vez, cuando se les pidió que levantaran la mano a los candidatos, en realidad no eran más de 4 o 5. Alguien del público dijo (medio bromeando pero con mucha verdad de fondo) que los políticos no iban a ese tipo de conferencias porque ya lo saben todo. Y este fue precisamente uno de los ejes centrales durante toda la plática; hacer las cosas de manera diferente, darle la vuelta a la moneda… los tiempos han cambiado y aquel que se quede estacionado en las viejas convicciones e ideas, por mucha lana que le meta a su campaña, no tiene demasiadas probabilidades de ganar. Lo que antes funcionaba ahora es obsoleto, las reglas del juego son otras, el electorado se ha vuelto más inteligente, los espacios en medios de comunicación masiva como tele o radio se restringieron mientras Internet cobra una fuerza inaudita, tal y como ejemplificó Fernando Bribiesca (la “oveja blanca” de la familia Bribiesca Sahagún, como se le conoce en los medios por haberse mantenido alejado del escándalo de sus hermanos; al parecer a él sí le gusta chambear) en el apartado de “Medios Alternativos” con la campaña de Obama a través de Youtube.
Resulta en verdad increíble que los candidatos prefieran gastar a lo loco miles o incluso millones de pesos en su campaña política, cuando simplemente con una buena estrategia, un eslogan pegajoso, una encuesta que sirva, una foto carismática… cambiando el enfoque de su discurso trillado, utilizando medios alternativos de publicidad, tratando de escuchar más de lo que hablan, creando empatía con la población en vez de distanciamiento… por supuesto que se obtendrían mucho mejores frutos y con una pequeña fracción del montón de dinero que invierten la mayoría para terminar perdiendo.
Si nuestros políticos no tienen la humildad y el interés de asistir a un curso impartido por profesionales en la materia, ¿ustedes creen que se van a molestar en escuchar los problemas de las comunidades rurales, por ejemplo? Su soberbia y cerrazón no tienen límites. Lo preocupante del asunto, creo yo, es que si por obra y gracia del espíritu santo (o del señor don dinero a carretadas) estos ilustres personajes llegan a obtener el anhelado hueso, seguirán la misma línea de su campaña, teniendo como asesores y colaboradores cercanos al compadre, primo o vecino, en lugar de gente capacitada que sepa realmente de lo que se trata la polaca… despilfarrando sin ton ni son los recursos públicos y todavía teniendo el descaro de venir a presumírnoslo con espectaculares y spots: ¡¡¡chorrocientos mil millones en obras!!! Como si mientras más dinero se tire a la basura fuera mejor y cantidad fuera igual a calidad.
Al final, tanto en política como en la vida misma, efectivamente todo se reduce al sentido común, aunque bien sabemos que suele ser el menos común de los sentidos. Los errores de principiante que vemos en la temprana acometida publicitaria de esta campaña electoral no tienen perdón de Dios… partidos que continúan tratando de defender lo indefendible, promocionándose a sí mismos con spots patéticos, como si no supieran que precisamente los partidos políticos son las instituciones con menor credibilidad en el país… candidatos (o candidatas) angustiados porque salieron prietos y poco agraciados en la foto (contra mater natura nada se puede hacer), sin darse cuenta siquiera que con esa cara de tamal aplastado (¿en verdad les resulta tan difícil sonreír?) no van a convencer ni a un asno de que vote por ellos. Ojalá les aproveche el dinero que se están “ahorrando” con tal de no contratar a buenos publicistas.
aronti@yahoo.com
Labels: campaña, campañas, candidatos, Galo, Limón, políticos, publicista